Al sur del Valle de Salazar, hace su aparición uno de los fenómenos más espectaculares de la naturaleza del Pirineo. Se trata de profundos barrancos encajonados y foces. En Navarra llamamos foces a las hoces, cañones o gargantas excavadas por los ríos cuando discurren por roquedos calizos. Las paredes verticales han sido talladas por la erosión a la vez que el río se iba encajonando a lo largo de millones de años.
Las foces son lugares con un microclima muy singular y de difícil acceso, por lo que su valor ecológico es altísimo.
Debido a sus condiciones de humedad, sombra y corrientes térmicas albergan una fauna y flora muy diversa.
La más cercana es la Foz de Aspurz , pero son igualmente impresionantes las de Arbayun y Lumbier.
Es recomendable realizar una visita al Centro de Interpretación de las Foces en Lumbier.
Fotos: archivo de Turismo del Gobierno de Navarra